\¿Por qué trabajar con grupos de apoyo y extensión?

En los grupos de apoyo y extensión, el objetivo no es etiquetar al alumnado, sino ofrecer oportunidades justas para aprender. Desde el enfoque de la Nueva Escuela Mexicana y los planes y programas de la SEP, la atención a la diversidad implica:

• Reconocer los distintos puntos de partida de tus estudiantes.
• Asegurar que todos puedan acceder al aprendizaje esperado, aunque no al mismo tiempo ni de la misma forma.
• Ofrecer retos adicionales a quienes ya dominan un contenido, evitando que se aburran o se desconecten.

Los grupos de apoyo se enfocan en reforzar habilidades esenciales; los grupos de extensión se centran en profundizar o aplicar lo aprendido a nuevas situaciones. Son grupos flexibles: cambian según el tema, no son fijos durante todo el ciclo.

Primer paso: diagnosticar de forma rápida y útil

Antes de formar grupos, necesitas una imagen clara del punto en el que se encuentra tu grupo. No requieres evaluaciones largas; basta con un diagnóstico breve y dirigido al aprendizaje que trabajarás la próxima semana.

Ideas de diagnóstico en menos de una sesión

• Español (lectura y escritura): un párrafo corto para leer en voz alta o en silencio, seguido de dos preguntas de comprensión; o un enunciado que deban completar o reescribir.
• Matemáticas: tres problemas que combinen lo que ya deberían dominar con lo que vas a introducir. Por ejemplo, sumas y restas con y sin llevadas, o problemas sencillos de medida o fracciones.
• Conocimiento del medio o Ciencias: una tabla de “lo sé / no lo sé todavía” sobre el tema; por ejemplo, el ciclo del agua, los ecosistemas o el cuidado de la salud.

Mientras el alumnado trabaja, observa y toma notas rápidas: \¿quién termina con facilidad?, \¿quién duda en cada paso?, \¿quién necesita más acompañamiento oral o visual? Estas observaciones serán la base de tus grupos de apoyo y extensión.

C\u00f3mo armar grupos de apoyo y extensión para la próxima semana

Con el diagnóstico listo, puedes organizar a los estudiantes en grupos flexibles que funcionen durante una o dos semanas y luego se ajusten según nuevos avances.

1. Definir el foco del apoyo

El grupo de apoyo no es un espacio para “repasar todo”, sino para atender un obstáculo clave que está frenando el aprendizaje. Por ejemplo:

• Identificar la idea principal en un párrafo.
• Dominar la suma y resta con llevadas.
• Entender la diferencia entre causa y consecuencia.

Escoge un solo foco por semana; así podrás ver avances claros y no saturas al grupo.

2. Definir el foco de extensión

El grupo de extensión permite a algunos estudiantes ir más allá de lo básico. El foco puede ser:

• Aplicar lo aprendido a una situación real o cercana a su contexto.
• Analizar diferentes puntos de vista de un mismo tema.
• Diseñar un producto sencillo: afiche, cartel, problema matemático, maqueta o experimento.

La extensión no es “más tarea” ni actividades más largas, sino actividades más profundas, con mayor reto cognitivo.

3. Criterios para formar los grupos

Considera estos criterios al armar tus grupos:

• Resultados del diagnóstico: quienes comparten dificultades similares pueden trabajar juntos.
• Habilidades socioemocionales: evita juntar a demasiados estudiantes que se distraen entre sí en el mismo grupo de apoyo.
• Flexibilidad: aclara desde el inicio que los grupos son temporales y cambian según el tema y los avances.

En un grupo de 30 estudiantes, podrías tener, por ejemplo: 10 en apoyo, 10 en trabajo estándar y 10 en extensión. Esto puede variar semana a semana.

Organización del tiempo en aula

No necesitas cambiar toda tu planeación para aplicar esta diferenciación. Puedes iniciar con dos momentos diferenciados a la semana.

Propuesta de organización para la próxima semana

• Día 1: diagnóstico breve y explicación a los estudiantes de qué son los grupos de apoyo y extensión.
• Día 2 y 3 (20–25 minutos):
  • Grupo de apoyo: actividades guiadas paso a paso, uso de material concreto, lectura compartida, ejemplos modelados.
  • Grupo estándar: práctica independiente con apoyo ocasional del docente.
  • Grupo de extensión: tareas de aplicación, análisis, comparación o creación de productos sencillos.
• Día 4: cierre conjunto con puesta en común: \¿qué aprendimos?, \¿qué fue fácil?, \¿qué nos costó más?, \¿qué estrategias nos ayudaron?

Mientras trabajas con el grupo de apoyo, puedes dejar instrucciones claras y materiales listos para los otros grupos, de modo que funcionen con mayor autonomía.

Estrategias para que los grupos funcionen mejor

1. Explicar el propósito a los estudiantes

Evita que vean los grupos como premios o castigos. Puedes decir algo como: “Estamos trabajando en grupos porque todos aprendemos de forma diferente. Algunas personas necesitan más práctica en cierto tema y otras necesitan más retos. Los grupos irán cambiando según lo que vayamos aprendiendo”.

2. Usar materiales sencillos y cercanos

• Tarjetas con palabras, números o problemas.
• Cuadernos de los estudiantes para rescatar ejemplos.
• Objetos del aula o del contexto: tapitas, palitos, hojas, envases limpios, recortes.

No es necesario contar con material especializado; lo importante es que las actividades sean claras, significativas y conectadas con el aprendizaje esperado.

3. Evaluación formativa constante

Toma notas breves durante el trabajo en grupos: \¿quién ya domina el objetivo?, \¿quién avanza pero aún requiere acompañamiento?, \¿quién necesita una estrategia distinta? Con esas notas podrás reorganizar tus grupos para la semana siguiente.